Nosotros estubimos en el Ap. EL ÁLAMO, con 2 hab + 2 baños + cocina-comedor + sofá -cama muy bueno, en un ático-duplex, con ascensor hasta el apartamento.
Se trata de un alojamiento muy completo, con buenas instalaciones, bién equipado, muy cómodo (quitando en el baño de arriba, que si eres alto das en el techo en algunas partes...) Y TODO NUEVO.
En el centro de un pueblo muy tranquilo, pero con muchos bares, supermercados, panaderías, carnicerías... piscinas naturales en el río, cerca del embalse de Burguillo, de Gredos y del valle del Tiétar...
Muy recomendable para dos parejas, aunque la parte de arriba es diáfana y no hay mucha intimidad en esa habitación (la de abajo si que tiene puerta), o bién para familia.
Un saludo.
Hace un par de semanas estuvimos en Navaluenga con unos amigos y nos hospedamos en estas casas.
Exactamente nos tocó la Campanilla, creo, y la verdad es que super bien. Eramos 3 parejas y nos peleamos por las habitaciones por que la de matrimonio era super bonita.
Increíbles las vistas y el jardín que, aunque hacía mucho frío se agradecía tener espacio exterior... nosotros vivimos en pisos y el tener jardín aunque sea unos días se agradece.
El pueblo es una pasada, rodeado de naturaleza, hay muchísimas cosas que hacer en los alrededores. Vamos que si necesitáis salir de la ciudad Navaluenga es un gran destino. Además, si alquiláis casa pues mejor porque tienes mucha más autonomía. Decir que la cocina tenía de todo lo que uno puede necesitar cuando cocina de vacaciones, y las camas eran cómodas.
El fallo, las casas no tienen WIFI... hubiera sido un puntazo haber tenido WIFI
El alojamiento está muy bien, tanto en acondicionamiento como en equipamiento, el interior es moderno y agradable, y el trato fue muy bueno.
No todo es perfecto, y en el caso del apartamento duplex, que es en el que estuvimos, le veo un par de pegas al piso superior, que no impiden que sea un buen alojamiento, pero que es importante tenerlas en cuenta.
La primera es que el dormitorio de arriba no tiene una puerta que lo aísle del piso inferior, por lo que llega todo el ruido de abajo y falta intimidad (aunque según con quien viajes esto no tendrá importancia, claro). Y la segunda es que el techo abuhardillado es muy bajo en la zona del baño: una persona de más de 1,70 tendrá problemas para mirarse erguido en el espejo del lavabo, y si se acerca a 1,80 tendrá que ducharse encorvado. A cambio, seguro que a los niños les encanta dormir en el piso de arriba, y los problemas mencionados no les afectarán en absoluto. Superados estos hándicaps, me parece un alojamiento muy recomendable. Un punto muy positivo es la tranquilidad: el aislamiento de las ventanas es muy bueno, y a ello se añade que, aun estando en pleno centro del pueblo, la casa está en un rincón muy tranquilo donde no llega el bullicio callejero, lo cual, en según qué fechas, no es fácil de encontrar en Navaluenga. Ah, el trato personal fue muy bueno, tanto con la propietaria como con Nieves.